2 años ...

En este apartado, encontraran características evolutivas de niños de 2 años.





Desarrollo del lenguaje.

El lenguaje es el principal medio de comunicación de los seres humanos, a través de él podemos intercambiar información, mensajes, ideas y sentimientos. Es una destreza que se aprende de manera natural en los primeros años de vida, pues el niño empieza a hablar en interacción con su madre y con los adultos. Para el desarrollo del lenguaje existen dos factores necesarios e importantes: La maduración biológica y las influencias ambientales, el primero está referido a los órganos que intervienen en el habla, que nos hacen capaces de emitir sonidos, palabras, frases y comunicarnos oralmente; el segundo se refiere a que los niños necesitan de oportunidades que brinda el entorno y de una estimulación adecuada, al utilizar el lenguaje oral, el niño recibirá el afecto y la atención de los padres y se dará cuenta que hablar es necesario para comunicar sus necesidades y deseos.
¿Cómo se desarrolla el lenguaje en los niños de 2 años?
Se interesa más por la comunicación verbal, ya es capaz de expresar frases de dos a tres palabras y utilizar algunos pronombres personales (mío, tú, yo).
Este es el proceso normal del desarrollo del lenguaje en los niños, es posible que algunos salgan de los estándares establecidos, pero es común, ya que cada niño es diferente como también su entorno.

Perfil motriz

Se conoce como  desarrollo psicomotor a la madurez psicológica y muscular que tiene una persona, en este caso un niño.   Los aspectos psicológicos y musculares son las variables que constituyen la conducta o la actitud.  Al contrario del intelectual que está dado por la maduración de la memoria, el razonamiento y el proceso global del pensamiento.
El desarrollo psicomotor es diferente en cada niño, sin embargo, es claro que él se presenta en el mismo orden en cada niño.  Es así, por ejemplo, que el desarrollo avanza de la cabeza a los pies, por ello vemos que  el desarrollo funcional de la cabeza y las manos es primero que el desarrollo de las piernas y los pies.
Los factores hereditarios, ambientales y físicos también influyen en el proceso de crecimiento psicomotor. Por ejemplo, vemos que la habilidad para hablar más temprano es propia de ciertas familias y que las enfermedades pueden afectar negativamente el desarrollo motor; también es claro que la ausencia de estimuladores visuales, táctiles y/o auditivos afectan la madurez psicológica.
A continuación  se presenta  un resumen de lo que debería observarse en el proceso de crecimiento psicomotor de los niños de dos años:
Corre, sube y baja escaleras sin ayuda, puede pasar las páginas de un libro de una en una, se viste casi sin ayuda (las prendas sencillas), dice frases cortas y puede comunicar sus necesidades de evacuación. Inclinación hacia adelante, bamboleo en el paso, dificultad para cambiar de dirección, usa los dos pies para subir, salta en el lugar, empuja, patea, pega, pellizca, trepa.

Función semiótica.

Al  termino del periodo sensomotor, hacia un año y medio o dos, aparece una función fundamental para la evolución de las conductas ulteriores, y que consiste en representar algo (un significado cualquiera: objeto, acontecimiento, esquema conceptual, etcétera) por medio de un significante diferenciado y que solo sirve para esa representación: lenguaje, imagen mental, gesto simbólico, etc.  Se denomina simbólica a esa función generadora de la representación.
En el transcurso del segundo año aparece un conjunto de conductas que implica la evocación representativa de un objeto o de un acontecimiento ausente y que supone, en consecuencia, la construcción o el empleo de significantes diferenciados.  Pueden distinguiese cinco de esas conductas, de aparición casi simultaneas, y que vamos a enumerar en orden de complejidad creciente:
Hay, ante todo, la imitación diferida, es decir, la que se inicia en la ausencia del modelo. En una conducta sensomotora, el niño comienza por imitar en presencia del modelo (por ejemplo: un movimiento de la mano), después de lo cual puede continuar en la ausencia de ese modelo, sin que ello implique ninguna representación de pensamiento.
Hay, seguidamente, el  juego simbólico o juego de ficción. Por ejemplo, una niña que ha inventado su primer juego simbólico, aparenta dormir, sentada y sonriendo ampliamente, pero serrando los ojos, con la cabeza inclinada y el pulgar en la boca, según lo que habitualmente suele hacer cuando duerme. En este caso la representación es neta y el significante diferenciado es, de nuevo,  un gesto imitador, pero acompañado de objetos que se han hecho simbólicos.
El dibujo o imagen grafica es, en sus comienzos, un intermediario entre el juego y la imagen mental, aunque no aparece antes de los dos o de los dos años y medio.
Viene luego, la imagen mental, que aparece como una imitación interiorizada.
Por ultimo, el lenguaje naciente de la evolución verbal de acontecimientos no actuales. 

Sexualidad.

El Psicoanálisis, con Freud como indicador, el que ha planteado que la sexualidad aparece desde el nacimiento y que durante las sucesivas etapas de la infancia que diferentes zonas corporales proporcionan gratificaciones especiales al individuo, pues están dotadas de una energía que busca placer, la libido.
Freud plantea que la sexualidad genital madura es el resultado de un desarrollo sexual infantil que denominé pre genitalidad.
Para el psicoanálisis la libido es la energía sexual que realza con placeres específicos algunas funciones vitales como el comer, la regulación intestinal y el movimiento corporal. Selo después de haber resultado exitosamente una cierta secuencia de esos usos pre genitales de la libido, la sexualidad del niño(a) alcanza una breve genitalidad infantil, que de inmediato se vuelve cada vez más latente, transformada y desviada, pues la maquinaría genital sigue siendo inmadura y los primeros objetos del deseo sexual inmaduro están prohibidos para siempre por el tabú universal del incesto
Al hablar de sexualidad infantil se pretende reconocer la existencia, en esta etapa de la vida, de excitaciones o necesidades genitales precoces, así como también la intervención de otras zonas corporales (zonas erógenas) que buscan el placer (por ejemplo la succión del pulgar) independientemente del ejercicio de una función biológica (la nutrición). Es por esto que el psicoanálisis habla de sexualidad oral, anal, fálica, genital.
Todo ser humano pasa por las diferentes fases del desarrollo de la sexualidad:
Los niños de dos años esta finalizando la etapa oral, aunque quedan indicios de ella, entran en la etapa anal. Que a continuación desarrollaremos.

Fase anal
La fase anal es la segunda fase de la evolución de la libido y puede situarse de los 2 a los 4 años de edad.
En esta fase la libido se organiza al alrededor de la zona erógena anal, el objeto de satisfacción está ligado con la función de defecación (expulsión retención) y al valor simbólicos de las heces.

Para el niño(a) eliminar orines o heces es algo normal, natural y placentero, lo considera incluso como una especie de regalo que dan al adulto, esto porque para él (ella) es como desprenderse de parte de su cuerpo y entregarlo a mamá y a papá. Para el niño(a), las heces representan su creación y le agrada su olor, textura y color.
El niño(a) debe aprender a cooperar con una persona más poderosa lo que provoca experiencia nuevas de satisfacción y ansiedad. La satisfacción viene de cumplir el deseo de sus padres, avisar y controlar. La ansiedad proviene de la vergüenza y la desaprobación de los demás.
La función auto conservadora del erotismo anal está dada por el proceso de evacuación de los intestinos y la vejiga y por el placer que provoca el haberlo hecho bien. Este sentimiento de bienestar compensa, al inicio de esta fase, los frecuentes malestar y tensiones padecidos por el niño(a), mientras sus intestinos aprenden a realizar su función diaria.
Esta fase se inicia, porque en el niño(a) aparecen excrementos mejor formados, el sistema muscular, se ha desarrollado y el medio social le demanda control de sus evacuaciones, introduciéndose así la dimensión de que él o ella pueden descargar voluntariamente y que tienen la capacidad de alternar a voluntad los actos de retener y expulsar.
El niño(a) obedece en esta fase a impulso contradictorios que van a caracterizar su forma de comportarse y de relacionarse con los demás. Estos son la retención y la eliminación. Su aparición va a alternarse. El desarrollo del sistema muscular le da mayor poder al niño(a) sobre el medio ambiente que le rodea, pues adquiere la capacidad para alcanzar y asir, para arrojar y empujar, para apropiarse de cosas y para mantenerlas a cierta distancia. Esta etapa se caracteriza por la lucha del niño(a) por su autonomía, empieza a ver el mundo como yo tú, mí, mío. Es un niño(a) fácil de convencer si él (ella) ha decidido hacer lo que se espera de él (ella), pero es difícil de encontrar la forma de que desee precisamente eso. El niño(a) al mismo tiempo quiere acercarse y soltarse, acumular y descartar, aferrarse y arrojar. Por lo tanto, las relaciones sociales están marcadas por la antítesis soltar aferrarse.

Estas dos primeras fases de la sexualidad infantil se centran en el autoerotismo, en las fases siguientes aparece ya un objeto sexual externo al individuo. Para Freud el acceso al objeto libidinal se da en forma sucesiva que va desde el autoerotismo, el narcisismo, la elección homosexual y la elección heterosexual.







Bibliografía

·        Piaget, J. (1980) “psicología del niño”. Madrid, Morata. Capitulo III,  pág. 15 a 95. 
·        Freud, s.  (1992)”Tres ensayos sobre una teoría sexual”. En obras completas de Sigmund Freud. Tomo 7. Buenos aires: Amorrortu.

·        Rodríguez, María Esther. (1998) “Educación psicomotriz, Aportes para la intervención docente”


Estas características fueron seleccionadas por mi, 
con autores me gusta trabajar. Espero les sea útil...

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